Las ventajas de contratar un depósito a plazo

Un depósito a plazo es lo que conocemos como depósito con imposición a plazo fijo. Básicamente es entregar una cantidad de dinero a una entidad bancaria que hayamos elegido durante un tiempo determinado. Cuándo ha pasado ese plazo, la entidad bancaria te devuelve todo el dinero que has dado a lo largo de año, más los intereses pactados en el momento de contratar el depósito.

Otra opción es recibir los intereses mensualmente, y estos se abonarán en la cuenta corriente de cada uno, y siempre abierta en la propia entidad. Es una buena forma de conseguir rentabilidad en tus ahorros, sin ponerlos en riesgo. Otras ventajas podrían ser:

  • Estos depósitos no tienen ningún riesgo, ya que están cubiertos por un fondo especial, llamado Fondo de Garantía de Depósitos que cubre hasta los 100.000 euros. Es la mejor opción para los ahorradores que no estén dispuestos a perder su dinero, y quieren despreocuparse mientras sus ahorros van creciendo.
  • Se pueden contratar vía internet o en la propia sucursal, con las mismas prestaciones y facilidades. El único requisito es tener una cuenta corriente abierta en el banco, y ser mayor de 18 años. En algunos casos puede variar.
  • En estos productos la liquidez es muy alta, y hay algunos de ellos que permiten rescatar el capital sin ninguna penalización.
  • La seguridad de no perder el capital y de cobrar un interés fijo son las características clave. Sobretodo en momentos como estos, que no se sabe qué hará el mercado mañana.

Todas las entidades ofrecen depósitos a plazo y es fácil encontrar uno que se ajuste a las necesidades de cada uno. También es importare saber que puedes tener el dinero diversificado en varios depósitos a plazo fijo, para una mayor inversión y dependiendo del plazo mayor rentabilidad.

 

Es importante dedicar un tiempo a conocer depósitos de varias entidades bancarias y a compararlos mediante compradores de depósitos.

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